Hasta principios de los años 2000, la Aduana utilizaba su propia red de radio para gestionar las comunicaciones con sus agentes sobre el terreno.  Sin embargo, esta red tenía una cobertura limitada que ya no respondía a las exigencias operativas de una Administración que contaba con 7000 agentes de uniforme repartidos en 200 brigadas de vigilancia, incluidos equipos cinológicos y motoristas.  La existencia de numerosas zonas blancas, la obsolescencia y el coste de mantenimiento de esta red han obligado a la Administración a proceder a su desmantelamiento.

La Aduana se decantó entonces por las redes móviles, que ofrecían una mejor cobertura geográfica, y se dotó de teléfonos inteligentes a todos los agentes aduaneros de uniforme. Sin embargo, esta solución no resultó adecuada.  Estas redes permitían comunicaciones de largo alcance y el intercambio de datos, especialmente de geolocalización, pero de forma limitada.  La Aduana consideró entonces la posibilidad de migrar a la red TETRAPOL utilizada por las fuerzas del orden, pero las limitaciones técnicas pusieron rápidamente fin a este proyecto.

En 2020, la Aduana tomó una importante decisión estratégica al adoptar AGNet, una aplicación desarrollada por AIRBUS SLC que no tiene red propia, sino que utiliza la cobertura de red de los operadores de telefonía 3G/4G (en modo «Over The Top» o «de transmisión libre») según el principio de «best-effort» (los operadores transmiten los datos lo mejor posible, utilizando los recursos disponibles, pero sin garantía de calidad).

La adopción de AGNet ha permitido optimizar y asegurar las operaciones sobre el terreno dotando a los agentes de un dispositivo de comunicación moderno, seguro y unificado.  Esta aplicación permite hacer llamadas, transmitir ficheros de vídeo, audio y fotos.  Con su ayuda, es posible situar geográficamente y localizar a los equipos para orientarlos y prestarles asistencia de forma instantánea y más eficaz.  Por su parte, los equipos pueden enviar una alerta en tiempo real desde el terreno a su centro de operaciones.

La puesta en funcionamiento de AGNet se realizó de forma progresiva y fue precedida por una fase piloto que se llevó a cabo de octubre de 2020 a junio de 2021.  Esta fase permitió identificar las necesidades y dictar las instrucciones de empleo adecuadas.  Un paso decisivo fue la dotación de equipos motorizados con cascos y motocicletas específicamente adaptados al uso de AGNet.  Concluida esta etapa, la aplicación pasó a utilizarse en todas las brigadas de vigilancia metropolitanas y se impartieron cursos de formación en cascada, a los que se sumó otro tipo de formación más especializada en la actividad profesional.  En total, doce instructores nacionales y 650 embajadores contribuyeron a formar a 4.500 agentes entre septiembre de 2021 y junio de 2022.  Su puesta en funcionamiento en las direcciones de ultramar y la guardia costera está en curso.

Actualmente, la intención de la Aduana francesa es unirse a la comunidad de usuarios de la Red de Radio del Futuro (RRF), una infraestructura de comunicación moderna, segura y compatible gestionada por la Agencia de Comunicaciones Móviles Operacionales para los servicios de Seguridad y Emergencia (ACMOSS).

La RRF se basa en la cobertura de dos operadores móviles nacionales.  Ofrece garantías en cuanto a la calidad del servicio y la priorización de las comunicaciones de los abonados a la RRF y da preferencia a los recursos de estos operadores en caso de necesidad.  La RRF también permite el acceso a otras redes mediante la itinerancia nacional.  Cuenta con su propio centro de supervisión (NOC), que garantiza la continuidad de las comunicaciones, y con su propio núcleo de red alojado en los centros de datos seguros del Ministerio del Interior.

Accesible a los distintos servicios de seguridad y emergencia (bomberos, policía, gendarmería y demás servicios de urgencia), la pertenencia a esta red permite :

• reforzar la seguridad de los agentes sobre el terreno, en un entorno cada vez más peligroso.
• comunicar fácilmente con los demás servicios con miras a coordinar mejor las actuaciones y optimizar las intervenciones en situación de crisis.
• reforzar la seguridad de las comunicaciones mediante la activación de mecanismos de defensa frente a las amenazas cibernéticas.  Por esta razón, la RRF cuenta con una homologación de seguridad por parte de la Agencia Nacional de Seguridad de los Sistemas de Información y el Centro Nacional de Ciberseguridad del Ministerio del Interior, que supervisa continuamente la red.
• comunicar incluso en situación de crisis (resiliencia en caso de incidente, de catástrofe natural o de atentado) gracias a la ampliación de la cobertura y a dispositivos complementarios de cobertura.

Respecto a este último aspecto, la ACMOSS prevé integrar las comunicaciones por satélite para extender la cobertura de la RRF, especialmente en las regiones remotas y los territorios de ultramar.  La agencia se plantea asimismo el recurso a las plataformas de servicios de gran altitud (HAPS), aeronaves estacionadas a varios kilómetros de altitud que prestan servicios principalmente de comunicación y observación en una amplia zona terrestre.

La ACMOSS también participa activamente en la cooperación europea a través del proyecto BroadEU.net, cuyo objetivo es crear un sistema europeo, el EUCCS, que interconectará las redes nacionales de comunicación utilizadas por las agencias nacionales encargadas de misiones críticas.  El objetivo de ACMOSS es conectar la RRF al EUCCS y participar en el trabajo de integración e interconexión para garantizar una comunicación segura y fiable en toda Europa.

El éxito de la RRF dependerá de la determinación de los actores implicados para colaborar eficazmente y vencer las dificultades inherentes a la transición hacia un nuevo sistema de comunicación.  La conversión a la RRF supone sin duda un reto para la Aduana.  Se trata de transferir las competencias funcionales asignadas a los agentes, y en particular a los equipos motorizados, garantizando al mismo tiempo la continuidad de los servicios.  Una fase piloto permitirá preparar y validar dicha transferencia, así como formar a los agentes de los centros operativos y de las brigadas.

Merece la pena el esfuerzo.  La RRF es un proyecto decisivo para la modernización de los sistemas de comunicación de los servicios de seguridad y emergencia en Francia.  Ofrecerá al Servicio de Aduanas francés una infraestructura de comunicación moderna, segura y resistente, que permitirá mejorar la coordinación, la eficacia y la seguridad de sus intervenciones.

Para más información
https://www.acmoss.fr/